Las decepciones de 2014

Cada año voy afinando el instinto en cuanto a las películas que de inicio me dan mala espina y prefiero evitar; por más que prevalezca esa idea de que para ser un buen crítico hay que ver de todo, yo seguiré prefiriendo ahorrarme tiempo perdido viendo malas cintas e invertirlo en las que valen la pena, para las cuales nunca bastará la vida. De cualquier manera se siguen colando cosas que hieren mis ojos y lastiman mi inteligencia, aquí enlisto las que más me decepcionaron este año.

Cantinflas

Sebastián del Amo, México 2014

No voy a mentir diciendo que esperaba una gran obra, pero tampoco negando que esperaba más de Sebastián del Amo. Es un divertimiento simplón, olvidable. Mi opinión completa pueden leerla aquí.

Godzilla

Gareth Edwards, USA 2014

Con un debut sobresaliente como garantía, la multipremiada Monstruos-zona infectada (Monsters, 2010), la elección de Gareth Edwars para una nueva versión de la saga del llamado Rey de los monstruos, Godzilla, parecía adecuada. Se dijo además que la película rendiría homenaje a Ishiro Honda, algo que efectivamente hizo… poniéndole su nombre a un personaje. De ahí en fuera es un espectáculo hueco, inútil, con una dirección de actores desastrosa –baste recordar la cara de menso con que se pasea Ken Watanabe toda la cinta- y que viene a reafirmar la idea de que los remakes son absolutamente innecesarios, pero ante todo, una muestra de la falta de talento creativo en el cine hollywoodense actual.

Moebius

Kim Ki-Duk, Corea del Sur, 2013

Desde Time (Shi Gah, 2006), el cine de Kim Ki-Duk viene dando tumbos y no ha podido retomar por completo el hilo de su carrera; parecía que tras Piedad (Pietà, 2012) había vuelto su vitalidad creativa, pero ésta se ve estampada contra la pared con Moebius, una película que si bien contiene elementos sumamente interesantes y todas las características de su estilo autoral, se pierde al utilizar los mismos de una manera forzada e innecesariamente exagerada, con lo cual termina siendo una pobre imitación de sí mismo. Este año ha estrenado One on One (il-dae-il), habrá que esperar a ver cómo resulta, aunque hasta ahora la crítica no le ha sido favorable.

Ninfomanía

(Nymphomaniac Vol. I y II) Lars von Trier, Dinamarca-Alemania 2013

Tengo una relación de amor odio con las películas de von Trier, cineasta del cual luego de haber visto esta especie de blockbuster pseudo-intelectual puedo afirmar ya sin miramientos que se trata de un personaje pretencioso que podría ser bueno si se dejara de empeñar por verse como enfant terrible que ya sólo apantalla a incautos. Talento lo tiene, ahí están ejemplos como Europa o Melancolía, por mencionar sólo dos, pero si sigue la línea de este aburrido e insípido díptico, que no se queje si su nombre es olvidado en la historia del cine.

Sólo los amantes sobreviven

(Only Lovers Left Alive) Jim Jarmusch, UK-Alemania-Francia 2013

Esta si me dolió, no me esperaba que una idea tan deleitable como una película de vampiros dirigida por Jarmusch pudiera fallar. Y sin embargo lo hace. No me parece una película mala por completo, sin embargo se percibe a lo largo de todo el metraje una sensación de estar incompleta, en ningún momento consigue meter a los actores en la trama de manera creíble, da incluso la sensación de haberla hecho desapasionadamente.

El sorprendente Hombre-Araña 2: La amenaza de Electro

(The Amazing Spider-Man 2) Marc Webb, USA 2014

Para eso sirven los reboots, para hacer basura carente de imaginación y gracia, para abandonar toda coherencia y pensar que el público es estúpido –o corroborarlo, según como le vaya en taquilla-. Todo en esta segunda parte del relanzamiento del Hombre-Araña es pésimo, los efectos, las actuaciones, la historia misma, vaya, las motivaciones de los villanos para convertirse en tales son seguramente las más estúpidas de la historia del cine. No lo creo, pero espero con firmeza que algo impida que hagan una tercera parte de este bodrio.

The Babadook

Jennifer Kent, Australia 2014

Debo traer descompuesta la brújula de las películas de horror cuando esta me parece un bodrio absoluto y sin embargo ha triunfado en prestigiosos festivales de cine fantástico como Sitges, Toronto y Austin; peor aún, cuando William Friedkin, nada menos que el creador de El Exorcista, ha dicho que nunca ha visto nada tan aterrador como The Babadook.

No entiendo porque me parece que la historia es muy débil, la premisa es completamente simple y las actuaciones de la madre y el niño son de principiantes. No entiendo porque en ningún momento me parece que se genere el suspense de una forma mínimamente inquietante. Ok, vi muchas otras malas películas malas de horror este año, pero ninguna publicitada e impulsada como esta, no concuerdo con los reconocimientos que ha merecido.