Regularmente
evito muchas películas, manejo mi vida por la máxima de so many movies, so little time, de
manera que me ahorro aquellas de las que de antemano sé que me arrepentiré de
haber visto. Sin embargo siempre termino
viendo algunas de las cuales esperaba más y me decepcionaron. Este año fueron
muchas. Lástima; pero presento aquí las que de plano creo deben ser borradas de
la historia del cine. (Ya, me faltó Star Trek, into darkness, pero esa mugre no califica ni como película, igual que la de Derbéz)
La vida de
Adéle (La
vie d’Adèle. Abdellatif Kechiche, Francia-Bélgica-España, 2013)
Si,
la lista la encabeza nada menos que la ganadora de la Palma de oro 2013 en Cannes,
el festival de cine más privilegiado del mundo. Lo malo de hacer una película
grandiosa es que a la siguiente el espectador espera el mismo nivel y los
jurados en los festivales tienden a ser condescendientes. Eso le pasó a
Kechiche con esta fábula aburrida del despertar sexual de una adolescente;
luego de la grandiosa Venus negra y
con sus antecedentes yo esperaba de la ganadora en Cannes algo excepcional y me
encontré con un capítulo hardocre de RBD. Película engañabobos, intrascendente.
Posesión infernal (Evil dead. Fede Álvarez,
USA 2013)
Vil
basura gringa innecesaria espantamensos apantallafaroles
El conjuro (The conjuring. James Wan,
USA 2013)
Vil
basura gringa innecesaria espantamensos apantallafaroles
Oldboy (Spike Lee, USA 2013)
Vil
basura gringa innecesaria espantamensos apantallafaroles. Ah caray, esta no es
de “horror”. Bueno, valen los términos por lo pobre, torpe y malhecha de
película que es.
El hobbit: La
desolación de Smaug
(The hobbit, the desolation of Smaug. Peter Jackson, USA-Nueva Zelanda 2013)
Ya
estuvo bien de hobbits. Ese libro de ninguna manera alcanzaba para tres
películas de tres horas y creo que Jackson se vendió definitivamente. Sí, es
entretenida pero completamente prescindible, descendió al nivel de porquerías
como Percy Jackson, Narnia, Titanic y bodrios similares.
La tienda de
los suicidas
(Le magasin des suicides. Patrice Leconte, Francia-Canadá-Bélgica 2013)
Esta
es la que más me duele como decepción, amo el cine de Leconte y es de los
cineastas que más me han marcado, pero debo decir que su exploración por el
cine de animación es fallido. Ojalá pronto reencuentre el camino.
Caníbal (Manuel Martín Cuenca,
España-Rumania-Rusia-Francia 2013)
La
mencionan como candidata al Goya como mejor película y a mí me parece débil,
absurda, mal abordada. En fin
Heli (Amat Escalante, México
2013)
Cierro
las decepciones con la ganadora del premio a mejor director en el festival de
Cannes. En Sangre (2005), ópera prima
de Amat Escalante, vi algunas virtudes que se potenciaron con Los bastardos (2008) y desaparecieron en
Heli. No entiendo su éxito porque es
simple, parca, inacabada. Ok, los defensores dirán que esas son sus virtudes,
pero el cine es magia y cuando esta no sucede no hay manera de defenderlo. Heli no es nada, una mirada simplona a
la violencia que actualmente se vive en México, pero no aporta nada, se queda a
medio término entre la denuncia y la dejadez. Nada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario